Demian
Hermann Hesse
El amor no debe pedir -continuó-, ni exigir tampoco. Ha de tener la fuerza de llegar en sí mismo a la certeza. Y entonces atrae ya en lugar de ser atraído. Sinclair, su amor ahora es atraído por mí, cuando llegue a atraerme, entonces acudiré. No quiero ser un regalo, quiero ser ganada. |
La vida de cada hombre es un camino hacia sí mismo, el intento de un camino, el esbozo de un sendero. Ningún hombre ha llegado a ser él mismo por completo |
Pero cada hombre no es solamente él; también es el punto único y especial, en todo caso importante y curioso, donde, una vez y nunca más, se cruzan los fenómenos del mundo de una manera singular. Por eso la historia de cada hombre, mientras viva y cumpla la voluntad de la naturaleza, es admirable y digna de toda atención |